¿Qué es un Cenote?
Los cenotes son pozos naturales de agua de gran profundidad que se forman cuando la roca caliza se rompe y deja al descubierto agua subterránea. Estos pozos suelen estar llenos de agua cristalina que se alimentan por la filtración de la lluvia y por las corrientes de los ríos que nacen en el corazón de la tierra y se encuentran normalmente en la península de Yucatán, en México.
Los cenotes son una atracción turística popular en la Península de Yucatán en México debido a su belleza natural y al hecho de que son una fuente importante de agua dulce en una zona que es predominantemente árida. Además, muchos de los cenotes se utilizan como lugares para nadar, bucear y practicar otras actividades acuáticas.
La temperatura media de los cenotes es de 24 grados como máximo, por lo que nadar en ellos se convierte en un auténtico lujo.
En la cultura maya representaban tanto la vida como la muerte. Además de ser una fuente importante de agua para el pueblo maya, representaban la puerta de entrada al mundo de los muertos: el Xibalbá. El nombre de cenote proviene de los mayas, que los llamaron Dz´onot, que significa “caverna con agua”.
¿Cómo se origina un cenote?
La mayoría de los cenotes se encuentran en la Península de Yucatán y tienen un suelo de roca caliza muy porosa que, al derrumbarse por la lluvia y corriente de los ríos subterráneos se colapsa y deja al descubierto el agua subterránea, dan lugar a la formación de los cenotes.
En Riviera Maya ocurre el fenómeno de la haloclima, cuando el agua del mar ingresa a la parte continental y, al encontrarse con el agua dulce de los ríos, disuelve la roca con mayor rapidez causando derrumbes que forman grandes cámaras inundadas.
¿Cómo se recargan los cenotes?
El agua de los cenotes proviene principalmente de la lluvia. Ésta queda retenida en la vegetación y pasa a través de las rocas, quedándose guardada en ellas. Cuando el agua se infiltra, recarga los acuíferos y parte del agua llega a la depresión geológica generada.
Tipos de cenotes
La Península de Yucatán cuenta con distintos tipos de cenotes, dependiendo de su edad, que se clasifican en los siguientes:
Cenote de Caverna:
Son los más jóvenes. Su color va desde el verde esmeralda al azul intenso y puede apreciarse por los orificios en su bóveda.
Cenote Semiabierto:
Son los de mediana edad y tienen una parte descubierta. Pueden estar conectados con otros.
Cenote Abierto:
Son los de mayor edad, están completamente descubiertos porque la bóveda colapsó y cuentan con muchas especies en su interior.
Cenote Antiguo:
Son parecidos a una laguna u oasis en medio de la selva.
Flora y fauna del cenote
La flora y fauna que podemos encontrar en un cenote no tiene nada que ver con la existente en otros lugares.
En su interior pueden encontrarse peces de distintas especies como el guppy y el bagre, además de distintas variedades de crustáceos marinos. También habitan peces Dama Blanca Ciega o la Anguila Ciega Yucateca, ambas en peligro de extinción.
En los alrededores de los cenotes, también es habitual encontrar otras especies como tortugas, iguanas, ranas, mariposas, golondrinas o Pájaros Toh, conocidos como “ave de los cenotes”.
En cuanto a la flora, va variando dependiendo de su cercanía a la costa, aunque es normal ver raíces de árboles, lirios y algas.
Importancia de los cenotes en la actualidad
En la actualidad, los cenotes nos dan una información muy útil sobre el desarrollo del planeta, además de seguir aportando datos sobre la cultura maya. Son, sin duda, uno de los mayores atractivos de la zona.
Son unos estupendos sitios de exploración de la naturaleza, así como de expediciones arqueológicas para encontrar restos mayas.
Además, sin duda son una importante fuente de agua, debido a la inexistencia de ríos superficiales en la Península de Yucatán.
Los mejores cenotes en Riviera Maya
Te mostramos los cenotes que puedes visitar en la Riviera Maya.
Cenote Ik-Kil
Conocido también como el cenote sagrado azul, para muchos es considerado el más hermoso de Yucatán. Situado a 43 metros por debajo del nivel de la superficie y con un diámetro de 60 metros, este cenote se convierte en parada obligatoria si vas a visitar la antigua ciudad maya de Chichen Itzá. Las paredes de Ik-Kil están cubiertas de hojas verdes y sus enredaderas le dan un aspecto majestuoso.
Cenote Hubiku
Traducido como “el gran señor” o “nido de iguanas”, el Hubiku es un cenote subterráneo con una entrada u ojo en el techo. Este cenote joven cuenta con una profundidad de 27 metros y con un diámetro aproximado de 50 metros. Merece la pena ver cómo la luz de mediodía desciende por el ojo de la bóveda hacia las aguas cristalinas, creando un hermoso espectáculo.
El cenote azul
Ubicado entre Playa del Carmen y Tulum, toma su nombre de sus aguas azul turquesa. Se trata de un cenote abierto, en forma de L y que cuenta con distintas profundidades, lo que lo hace ideal para ir con toda la familia. Nada más llegar, se encuentran dos pozas de baja profundidad, que dan paso a una zona principal dividida, a su vez, en dos partes con dos niveles de profundidad.
Cenote Chac Mool
Traducido al español, Chac Mool significa “garra de jaguar”. Es el cenote ideal para la práctica del buceo. Una de sus principales atracciones es el Air Dome, una campana de aire donde disfrutar de una gran paz. Este cenote tiene una profundidad de 14 metros y cuenta con zonas verdes, propiciando un ambiente fresco y acogedor.
Cenote Dos Ojos
Se trata de un conjunto de cuevas subterráneas de 60 km ubicadas en Tulum, Quintana Roo. Perteneciente al Parque Dos Ojos, este cenote es ideal para nadar, practicar snorkel y bucear entre cavernas y formaciones rocosas. El contraste de su juego de luces natural con sus aguas crea un espectáculo digno de ver.
Cenote Siete Bocas
Como su nombre indica, cuenta con 7 respiraderos para ver las distintas caras de este cenote. Muchas de sus galerías están conectadas entre sí y se puede ir nadando de una a otra, observando las raíces de los árboles buscando el agua dulce. El único inconveniente del Siete Bocas es su precio, siendo uno de los más caros de la zona.
Gran Cenote
Se trata de un cenote semiabierto, ya que tiene una parte que recibe los rayos del sol y otra parte con cueva. Sus aguas cristalinas hacen posible ver fácilmente tortugas y peces que habitan en su interior. Gran Cenote está rodeado de la selva mexicana, lo que lo convierte en un lugar fantástico para disfrutar de la naturaleza. La temperatura en sus dos zonas ronda los 24 grados.
Cenote Choo-Ha
Traducido al español, sería “gota de agua”. Se trata de un cenote joven que se encuentra a unos 12 metros de profundidad bajo la tierra. Es el cenote ideal para ir con niños, dada su poca profundidad, aunque hay que tener cuidado con las estalactitas y estalagmitas. El acceso a través de las escaleras de madera debe hacerse con precaución, ya que pueden resbalar por la humedad existente en el ambiente.
Consejos para visitar los cenotes
Como estamos seguros de que visitaréis uno o varios de los cenotes de los que os hemos hablado, vamos a daros una serie de consejos a tener en cuenta para que la experiencia sea lo más satisfactoria posible:
- Es importante ver qué tiempo va a hacer el día de la visita. Lo mejor para días nublados son los cenotes cerrados.
- Llevar lo imprescindible para nadar. No olvides el bañador o las gafas de bucear.
- Un inconveniente asociado a los cenotes son los mosquitos, por lo que se hace imprescindible llevar repelente.
- La mayoría de los cenotes cobran entrada, por lo que habrá que llevar pesos mexicanos suficientes para ello o para comprar alguna cosa en las zonas designadas para ello.
- Consultar las actividades, sobre todo si tienes alguna enfermedad como asma o diabetes, para evitar que suponga un riesgo para vuestra salud.
Con todo esto, estamos seguros de que la experiencia de visitar un cenote será la más increíble que vivirás en mucho tiempo.